Estás de vacaciones y te alojas en un hotel. Bajas a desayunar y nada más entrar en el comedor te encuentras con un surtido de dulces y embutidos a los que es difícil resistirse. Sigue estos consejos para comer sano en un bufé libre ya ya no sufrirás por arruinar tu plan de alimentación saludable.
Desafiando a las tentaciones de los bufés
Un buffet libre, o bufé, como indica la RAE que se debe escribir, es un paraíso para quienes disfrutan con la abundancia de comida y la variedad de platos. Probar un poco de aquí y un poco de allá es uno de los mayores atractivos de los bufés libres, incluso más que el mero hecho de poder ingerir grandes cantidades de comida.
Sin embargo, esta tentadora oferta puede resultar un desafío para quienes buscan mantener una dieta equilibrada y saludable. Comer sano en un bufé libre es complicado. El amplio surtido de platos y la libertad para servirse pueden llevarnos a caer en excesos poco saludables. Más aún si estamos en vacaciones, momento en el que nos relajamos en todos los sentidos.
Si te encuentras frente a un bufé libre y deseas hacer elecciones inteligentes para cuidar tu bienestar, aquí tienes algunos consejos para comer sano y disfrutar de la experiencia sin excederte.
Pautas para comer sano en un bufé libre
Come despacio y mastica bien
Al darte un tiempo adecuado para comer, tu cuerpo tiene la oportunidad de reconocer las señales de saciedad. Masticar bien los alimentos también mejora la digestión y permite disfrutar más de los sabores de cada plato.
Elige la verdura como guarnición
Es uno de los pilares para comer de manera saludable en un bufé libre. Cuando te enfrentes a una amplia selección de platos, opta por guarniciones a base de verduras; cuanto más coloridas, mejor. Estas no solo son bajas en calorías, sino que también están llenas de nutrientes esenciales que contribuyen a una dieta equilibrada. Intenta priorizar los vegetales en crudo, pero también puedes elegirlas cocinadas a la plancha, al vapor, etc.
Bebe agua
Tu bebida principal para mantener la hidratación de tu cuerpo y saciar tu sed será siempre el agua. Puedes elegirla con gas y aromatizarla con limón o menta, si quieres darle un toque más refrescante. Evita a toda costa las bebidas alcohólicas y los refrescos azucarados. El alcohol puede aumentar significativamente la ingesta calórica sin aportar ningún nutriente. Recuerda, además, que es perjudicial para la salud incluso en dosis bajas, no hay cantidad de alcohol segura.
Toma fruta de postre preferiblemente
Cuando llegue el momento del postre, en lugar de optar por las tentadoras opciones cargadas de azúcar y grasas, elige frutas frescas. Son una excelente fuente de vitaminas, minerales y antioxidantes, además de ser naturalmente dulces y satisfactorias. Aprovecha que muchos bufés libres ofrecen la fruta ya cortada o presentada en forma de macedonias. Si quieres variar, el yogur natural sin azúcar es otra opción de postre saludable.
Coge porciones pequeñas de comida y evita levantarte muchas veces
Es uno de los mejores consejos para comer sano en un bufé libre. Para evitar excesos, sírvete porciones pequeñas de comida. Esto te permite probar una amplia variedad de platos sin sobrecargar tu estómago. Además, evita hacer varios viajes a la mesa de las viandas. Cuantas más veces te levantes, más tentación tendrás de seguir rellenando el plato.
No te dejes llevar por la abundancia de platos
Aunque la variedad de opciones puede ser emocionante, no te sientas obligado a probar todo solo por amortizar lo que has pagado. Quien pague, al final, puede que sea tu organismo. Elige con cuidado y selecciona aquellos platos que realmente te gusten y puedas disfrutar al máximo.
No intentes probar todo el primer día
Si estás hospedado durante varios días en un hotel con bufé libre, no sientas la necesidad de probar todos los platos la primera jornada. Distribuye tus elecciones de manera equitativa a lo largo de tu estancia y disfruta de diferentes sabores cada día.
Opta por alimentos cocinados de manera saludable
Fíjate en cómo están elaborados los alimentos y elige siempre aquellos que se hayan sometido a métodos de cocción saludables. Opta por carnes y pescados hechos a la parrilla o al horno, vegetales cocidos al vapor o salteados, etc. Evita las frituras y los platos bañados en salsas.
Escucha a tu cuerpo
Aprende a reconocer las señales de hambre y saciedad de tu cuerpo. No comas solo porque es la hora, porque los demás lo están haciendo o porque hay que aprovechar que ya está pagado. Respeta las necesidades de tu organismo y come solo cuando realmente tengas hambre.
Disfruta conscientemente de cada bocado
En lugar de comer de forma mecánica y rápida, disfruta cada bocado con atención plena. Saborea los alimentos y aprecia sus texturas, sobre todo si son especialidades locales y no tienes la oportunidad de probarlas habitualmente.
En resumen, recuerda que comer sano en un bufé o buffet libre es una cuestión de hacer elecciones conscientes y equilibradas. No se trata de privarse por completo, sino de mantener el control y seleccionar opciones que satisfagan tus papilas gustativas y, al mismo tiempo, cuiden tu cuerpo. Al seguir estos consejos, podrás disfrutar de esta experiencia culinaria sin comprometer tu bienestar y mantendrás ese plan de alimentación saludable que tanto te beneficia.